inversión pública

Empresas Públicas invierten Bs2.453 millones en proyectos productivos

Por: Gonzalo Callisaya, economista

Las empresas públicas juegan un rol importante en el actual modelo económico vigente, proveen servicios básicos, generan excedentes y sus inversiones productivas impulsan el dinamismo de la economía.

La pandemia del COVID-19 tuvo un fuerte impacto en las empresas estatales acentuado por la mala administración del gobierno de facto que las quiso llevar a su liquidación; sus ingresos y ganancias se desplomaron, en esta situación las empresas redujeron sus costos y se endeudaron para obtener liquidez que les permitiera sobrellevar la situación.

Sin embargo, actualmente las empresas públicas han tomado medidas y están en plena recuperación, ya que, entre enero y agosto de este año, la ejecución del presupuesto de inversión de las empresas públicas ascendió a Bs2.453 millones, resultado de la aplicación de las medidas del gobierno nacional en relación con la reactivación de la economía.

Según datos del Sistema de Información Sobre Inversiones (SISIN) del Ministerio de Planificación del Desarrollo (MPD), las cinco empresas que reportan mayor ejecución presupuestaria de inversión en este periodo son: Empresa Siderúrgica del Mutún (59,4%), Empresa Estatal de Transporte por Cable “Mi Teleférico” (54,2%), Corporación Minera de Bolivia – COMIBOL (46,3%), Empresa Boliviana de Industrialización de Hidrocarburos – EBIH (39,3%) y Empresa Nacional de Electricidad – ENDE (38,6%). Dichas empresas ejecutaron un total de Bs1.567 millones, que representan el 64% de lo ejecutado por el total de las empresas que, a la fecha, tienen proyectos en marcha programados para 2022.

Fuente: SISIN/VIPFE/MPD

Los niveles de ejecución presupuestaria de los proyectos de inversión en las empresas públicas son reflejo de la recuperación de la economía, no solo en términos actuales sino también potenciales, toda vez que implican mayores operaciones a futuro, así como efectos multiplicadores y fuentes de empleo (directo e indirecto), en línea con los preceptos Modelo Económico Social Comunitario Productivo (redistribución del excedente en nuevos emprendimientos generadores de ingreso y empleo, y programas sociales para erradicar la pobreza), los Ejes y Metas del Plan de Desarrollo Económico Social 2021-2025 (Reconstrucción de la Economía, Industrialización con Sustitución de Importaciones, entre otros), y los esfuerzos realizados mediante los planes de desarrollo para incrementar los niveles de inversión en empresas no vinculadas con la actividad petrolera, como las empresas mineras, de electricidad, de servicios, de insumos para la producción agrícola, entre otras.

Los Bs1.567 millones ejecutados se concentran en proyectos relacionados con plantas de generación de energía, fabricación de laminados de acero y producción de fertilizantes.

Fuente: SISIN

Finalmente, como se puede apreciar en los datos expuestos, las empresas públicas, son entidades importantes en nuestra recuperación económica, hay que apoyarlas y trabajar en su fortalecimiento, para que nuestras empresas estatales, sean prosperas para consolidar una recuperación económica sólida.

Conoce los números del Tren Metropolitano de Cochabamba

El nuevo sistema de transporte que empezó a rodar por las calles de la Llajta este martes 13 de septiembre unirá 6 municipios y cuenta con servicios de wifi, aire acondicionado, cámaras de vigilancia, pantallas informativas, cargadores para celular y otros.

El Tren Metropolitano fue financiado en un 100% por el Tesoro General de la Nación (TGN). Con este avance, Cochabamba es el primer departamento del país en contar con un sistema de transporte férreo de pasajeros, que además es amigable con el medio ambiente al funcionar con energía eléctrica.

Durante la gestión 2020 el proyecto fue abandonado por el gobierno de Añez, llegando al punto que el puerto de Arica estuvo a punto de rematar los vagones del Tren Metropolitano debido a que el entonces ministro Ivan Arias, no destinó los recursos necesarios para la desaduanización.

El megaproyecto cochabambino demandó una inversión total de más de Bs 3.112,1 millones, de los cuales hasta mayo de 2022 se ejecutaron Bs 2.608 millones. Las líneas Roja y Verde cubrirán buena parte de la mancha urbana de la Llajta. La Línea Amarilla fue obstaculizada por la falta de voluntad de los alcaldes de Cercado, Manfred Reyes Villa y de Quillacollo, Héctor Cartagena, quienes se resisten a viabilizar el proyecto.

Recorrido del Tren Metropolitano de Cochabamba.

El Tren Metropolitano beneficiará a los municipios de Sacaba, Cercado, Quillacollo,
Colcapirhua, Vinto y Sipe Sipe que estarán integrados permanentemente en recorridos ininterrumpidos de 16 horas, en un trayecto con 43 paradas y tres líneas.

La construcción de la Línea Roja demandó una inversión de Bs 256,1 millones y tiene un
recorrido de 5,5 kilómetros entre la Estación Central (avenida 6 de Agosto y Barrientos) hasta la Facultad de Agronomía de la Universidad Mayor de San Simón, en la Avenida Petrolera. Las estaciones intermedias son El Arco, Santa Bárbara, Alejo Calatayud, OTB Universitario, Politécnico y El Molino, en un trayecto que se cubre en 12 minutos. Tres trenes circularán durante 16 horas diarias con intervalos de espera de 10 minutos.

Por su parte, la construcción de la Línea Verde demandó una inversión de Bs 936,5 millones, con una extensión de 27 km entre la Estación Central y Suticollo, atravesando el Cercado, Colcapirhua, Quillacollo, Vinto y Sipe Sipe, con 23 estaciones que se recorren en 45
minutos, con 4 vagones que trabajarán con una frecuencia de 15 a 20 minutos.

El Tren Metropolitano tiene 12 trenes de marca Metelitsa, que son sustentados por electricidad y bidireccionales, cada vagón tiene 33 metros de largo y 2,5 de ancho, con una capacidad de
376 pasajeros (66 sentados), cámaras de vigilancia, radioteléfonos internos, pantallas informativas, aire acondicionado y conexión a internet (wifi), espacios para personas con discapacidad, parqueos para bicicletas y otras comodidades. Las líneas Roja y Verde atenderán de 6:00 a 23:00, de lunes a viernes; y de 7:00 a 00:00 los sábados, domingos y feriados.

Economistas consideran que las recetas del FMI son “descabelladas y antipopulares”

El Fondo Monetario Internacional (FMI) publicó ayer los resultados de la consulta del Artículo IV respecto a Bolivia. Economistas rechazan las sugerencias del organismo internacional, que incluyen la eliminación del subsidio a los combustibles, devaluación del boliviano, recortes en la inversión pública, impuestos al ingreso de las familias e incluso la eliminación del aguinaldo de fin de año.

El presidente de la Comisión de Planificación, Política Económica y Finanzas de la Cámara de Diputados, Omar Yujra, sostuvo en declaraciones a medios de comunicación que “el FMI plantea recetas de política neoliberal que ya han hundido a otros países como Ecuador y Argentina”, y que “no sé puede entender la insistencia de hacer recomendaciones que no tienen pies ni cabeza, y que van en contra del bolsillo del ciudadano”.

El documento del FMI llamado Artículo IV, es resultado de la visita de un equipo de analistas que se entrevistan con entidades públicas y privadas, emitiendo un conjunto de recomendaciones que, en opinión del organismo internacional, deberían seguir los países. Muchas de las sugerencias se repiten desde hace más de 20 años, cuando el entonces presidente Gonzalo Sánchez de Lozada y si vicepresidente Carlos Mesa, intentaron aplicar un impuesto al salario que derivó en las luctuosas jornadas de febrero de 2003.

Por su parte, el economista y analista Juan José Bedregal, considera que “las recetas del FMI son descabelladas, ya que en un párrafo recomiendan eliminar los bonos sociales y la subvención a los combustibles, para luego sugerir programas de transferencias (bonos) enfocados en la población más pobre; lo cual es una completa incoherencia”.

En palabras de Bedregal, el FMI recomienda medidas antipopulares como la devaluación del boliviano, eliminación de bonos, subsidios, y hasta del aguinaldo de fin de año, para después recomendar “planes comunicacionales” que le digan a la población que las medidas son necesarias, cuando no lo son. Es decir, “el FMI recomienda dejar sin sustento a las familias y destinar los recursos a medios de comunicación que les mientan a esas familias diciéndoles que estarán mejor sumidas en la pobreza”.

La verdad de la deuda pública en Bolivia

Por: Elio Alberto Colque, especialista financiero

Las últimas semanas se observaron algunas aseveraciones tendenciosas respecto al estado de la deuda en el país. Otros mencionan que la deuda pública total en términos del Producto Interno Bruto (PIB) se encontraría alrededor del 80% del PIB.

Es importante puntualizar algunos elementos en relación a la verdadera situación en la que se encuentra la deuda pública en el país, un tema delicado que debe ser abordado con cuidado y responsabilidad, sin la finalidad de generar especulación y desinformación en la población boliviana.

Empecemos señalando la manera correcta de observar la deuda externa, la cual registró un saldo de $us12.698 millones en la gestión 2021, sin embargo, para determinar si este monto es o no sostenible se lo debe comparar con el tamaño de la economía (medida a través del PIB). En ese sentido, la deuda pública externa alcanza 31,2% del PIB, cifra muy por debajo de las tasas registradas durante la aplicación del modelo neoliberal, donde en promedio representaba 67% del producto entre 1985 y 2005.

¿Qué quiere decir lo anteriormente señalado? Que casi el 70% de nuestros ingresos como país eran destinados a pagar la deuda externa contraída, empero, actualmente esa proporción disminuyó sustancialmente, reflejo de una responsable administración de las finanzas públicas y del endeudamiento público. Asimismo, y considerando que el coeficiente de deuda (31,2% del PIB) se ubica por debajo de los límites referenciales establecidos por organismos internacionales como la Comunidad Andina (50%) y el Tratado de Maastricht (60%), se observa que Bolivia cuenta con un margen de endeudamiento, capacidad de pago y un nivel de deuda externa sostenible.

Algunos creen que la deuda externa se incrementó poco más del doble en relación a 2005, no obstante, no se señala que el PIB aumentó cuatro veces más en relación al mismo año. Un ejemplo de ello sería un prestatario de una entidad financiera, que a un inicio tenía una deuda de Bs5.000 con un nivel de ingresos de Bs9.000 pero que posteriormente pasó a tener una deuda de Bs12.000 con un nivel de ingresos de ¡más de Bs40.000! Lógicamente la entidad financiera observa una mejor capacidad de ingresos en el prestatario por lo que incrementará su monto de deuda. Los organismos financieros multilaterales y bilaterales siguen esa misma lógica para otorgar créditos a Bolivia.

En cuanto la deuda pública total, pese a los esfuerzos de varios analistas y el Ministerio de Economía y Finanzas Públicas (MEFP) por explicar el análisis riguroso y metodológico que se debe seguir para la deuda pública total, algunos medios, de manera cizañosa continúan mostrando cifras erróneas y no oficiales, a fin de alarmar a la población, señalando que la deuda pública sería superior al 78% del PIB.

En efecto, siguiendo la metodología y las buenas prácticas internacionales sugeridas por organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), para el cálculo de la deuda pública total, es imprescindible “netear o consolidar” la misma, a fin de evitar un error de doble contabilización; toda vez que, la deuda interna del MEFP, a través del Tesoro General de la Nación (TGN), es un activo para el Banco Central de Bolivia (BCB) y un pasivo para el TGN, lo mismo sucede con las empresas públicas, también debe existir una consolidación; es decir, si se habla sobre la deuda de todo el sector público, es importante recordar que tanto las empresas públicas como el BCB forman parte del mismo. En este sentido, según la Memoria del BCB, la deuda pública total al 31 de diciembre de 2021 alcanza a 46% del PIB, por debajo de los límites establecidos como recomendables.

Para terminar de explicar de manera correcta la dinámica de la deuda, es importante aclarar que la deuda pública en Bolivia es destinada de manera responsable a la inversión pública, lo cual genera retornos en el mediano y largo plazo, una situación totalmente contraria a lo que sucedía antes de 2005, cuando el país se endeudaba principalmente para pagar sueldos y salarios del sector público.

Finalmente, se menciona de manera incorrecta el contexto del riesgo país en Bolivia, el cual mantenía una tendencia estable antes del 2019; no obstante, durante 2020 la calificación de riesgo se redujo en hasta dos peldaños, debido a la incorrecta administración de la economía. Actualmente, todos los indicadores macroeconómicos reflejan un compromiso de reconstrucción y reactivación económica con óptimas perspectivas que sin duda están posicionando al país nuevamente con una buena imagen a nivel internacional.

Qué hizo Bolivia para detener la inflación?

Por: Guillermo Oglietti, Ph.D en Economía Aplicada

Analizamos el ejemplo de Bolivia acerca de las medidas económicas adecuadas para detener la inflación y apostar a políticas heterodoxas de largo aliento (Vía: CELAG)

Para dominar la inflación hay que aprender del norte. Es lo que siempre nos dicen los economistas neoclásicos y, por esta vez, tienen razón. Hay que mirar al norte. Sí, pero ¡no tan al norte! Quédese en Bolivia, ahí aprenderemos en serio, porque hasta hace muy pocos años tenía los mismos problemas que en Argentina mientras que ahora todos tienen inflación, menos Bolivia.

Este país demuestra que existen políticas heterodoxas capaces de enfrentar con éxito la inflación. Demuestra que no es necesario ni recurrir al ajustismo de siempre ni repetir sus fracasos. Pero, hay que atreverse. Por eso, a modo de manual para ministros de economía, enumeramos las principales acciones diseñadas por Bolivia con efectos directos o indirectos sobre la inflación.

Desdolarización

Aumentaron los riesgos para los especuladores:

  • Se apostó fuerte generando pérdidas a los especuladores que apostaban en dólares: “se apreció” la moneda, de 8 a 7 bolivianos por dólar (actualmente, se mantiene en este valor). Se rompió la inercia alcista del dólar y se mandó la señal de que no siempre el que apuesta al dólar gana.

Aumentaron los costos para las carteras dolarizadas:

  • Se encareció el uso del dólar para ahorrar, ampliando el diferencial cambiario entre compra y venta, penalizando la costumbre de comprar dólares mensualmente para ahorrar, a la vez que ofrecían una tasa de interés real ligeramente más alta a quienes ahorraban en pesos.
  • Se encareció el uso del dólar para prestar, aumentando a un 66,5 % el encaje líquido que los bancos deben tener por cada dólar depositado, a la vez que se bajó al 11 % el encaje para depósitos en pesos.
  • Se aumentaron los requisitos para otorgar créditos en moneda extranjera y se facilitó el crédito en moneda nacional, aumentando así la preferencia de los bancos para otorgar préstamos en pesos.
  • Se cambió la composición de la deuda pública, haciendo desaparecer los títulos en dólares, emitiendo títulos en pesos, incluso para pequeños ahorristas.
  • Emisión del Bono BCB Bolivianización, para que bonistas pequeños y medianos cambiaran con ventaja sus títulos en dólares a pesos.
  • Se estableció un impuesto a las transacciones financieras en dólares del 0,3 %, para las cajas de ahorros con más de 2 mil dólares o depósitos menores al año.
  • Impuesto a la venta de moneda extranjera (0,7 %) dirigido a operaciones de venta de moneda extranjera en casas de cambio e instituciones financieras.

Indexadores alternativos al dólar:

  • Se empleó la Unidad de Fomento a la Vivienda, unidad de cuenta actualizada con la inflación local, como indicador para realizar contratos en moneda local y desalentar el uso del dólar como unidad de cuenta.
  • Se prohibió la indexación de tarifas en función del dólar.

Aumento de la oferta

Como al fin de cuentas toda escasez ‒ya sea generada por exceso de demanda, oferta insuficiente, especulación o acaparamiento‒ se traduce en inflación, el Gobierno boliviano siempre apostó, y mucho, por la producción:

Política de crédito súper-activa:

  • Crédito a la producción orientado. Usando coeficientes de reservas diferenciados y cupos máximos se orientó el crédito bancario a la producción (vivienda, vivienda social, empresas, microcréditos y Pymes), expandiendo la cartera de créditos ¡en casi 7 veces!
  • Créditos dirigidos a sustituir importaciones. Créditos SI BOLIVIA. Financiamiento a proyectos de inversión pública de gobiernos subregionales y comunidades indígenas. Fondos concursables de inversión productiva dirigidos a gobiernos autónomos municipales y comunidades indígenas.
  • Extensas inversiones en infraestructura de caminos y servicios públicos, que ampliaron la oferta al extender el área geográfica desde donde se provee a los grandes centros urbanos.
  • Inversión pública: Desde 2006 (con el paréntesis de Áñez) Bolivia fue uno de los países con mayor inversión pública del continente, apostando a que la mayor inversión pública en infraestructura atraería más inversión privada (crowdin-in en lugar del crowding-out que pronostican los economistas del norte global).
  • Participación pública directa en la producción y la oferta:
  • Empresa de Apoyo a la Provisión de Alimentos (EMAPA), empresa pública (creada en 2007) que brinda productos de la canasta familiar e industria nacional a precios justos a través de una red propia de supermercados.
  • También abastece de harinas a panificadores y otros sectores a quienes provee a precios justos a cambio de que se comprometan a sostener precios.
  • Central de Abastecimiento y Suministros de Salud (CEAS), institución pública que compra e importa medicamentos para proveer tanto a la red de instituciones públicas ‒farmacias municipales y Ministerio de Salud‒, como del sistema de salud privado, a cambio de precios justos.
  • Red de farmacias municipales (públicas, administradas por las Alcaldías) y farmacias populares y boticas (instituciones sin fines de lucro).
  • Empresa Boliviana de Producción Agropecuaria (USD 20 millones de inversión), que pone tierras fiscales a disposición de la producción agropecuaria dirigida a aumentar la producción en rubros donde no hay autoabastecimiento.
  • Fabricación de insumos estratégicos. Planta pública de producción de urea (fertilizantes) para impulsar la producción agropecuaria.
  • Inversión en Banca Pública (Banco Unión), con el propósito de aumentar la competencia con la banca privada, disminuir los costos financieros en el sector minorista y aumentar el crédito en sectores que tradicionalmente no acceden al mercado financiero privado.

Políticas activas en mercados

  • Nacionalización de recursos naturales estratégicos, permitiendo a Bolivia retener la renta generada por sus recursos naturales y reinvertirla en el desarrollo económico y social. Esta política también contribuyó a fortalecer las cuentas externas, reteniendo en el país las divisas que antes salían como importaciones y remesas de utilidades.
  • Mercado de cambios. Se constituyó un fondo contracíclico de reservas internacionales que ronda el 25 % del PIB aumentando la capacidad del Gobierno para disuadir a especuladores y disminuir los riesgos de quienes tienen activos en pesos.
  • Subsidios cruzados a los combustibles. Una parte de los ingresos extraordinarios que generan los precios del gas exportado se destinan a subsidiar el precio igualmente alto de los combustibles líquidos importados. Así se contrarrestó la inflación importada de combustibles a consecuencia de la guerra.
  • Regulación del comercio exterior de productos agrícolas. Uno de los aspectos más relevantes para el control de la inflación fue que las exportaciones de granos y derivados están reguladas. Se fijaron cupos de exportación, definidos en función del abastecimiento y precios internos, lo que impidió la importación de inflación de alimentos y agrícolas.
  • Se implementó una política activa de control del monopolio y del abuso de posición dominante, con seguimiento de precios casi a diario y control directo por parte de la Presidencia sobre precios relevantes de la economía.
  • El estado nacional no está solo en las actividades de regulación, los municipios tienen atribuciones para controlar los precios e intervienen permanentemente en actividades de control y sancionatorias en mercados locales.
  • Para enfrentar la pandemia, el Gobierno estableció precios máximos supervisados por las instituciones de defensa del consumidor, que cubren tanto los precios de medicamentos, como de servicios de terapia y de sepelio.
  • Asignación de divisas. Se construyeron indicadores objetivos para asignar divisas que permitieron priorizar los usos de los dólares disponibles dirigiéndolos a aquellas importaciones que más contribuyeran a sustituir importaciones o a generar divisas.

Políticas Tributarias

A sabiendas que la inflación también está causada por la evasión fiscal, implementaron políticas para disminuirla:

  • Política tributaria. Reintegro efectivo IVA por el 5 % del valor de la factura y se reintegraron 20 millones de pb.
  • Ley 1448 de facilidades para el cumplimiento de obligaciones tributarias, que amplía el plazo para el arrepentimiento eficaz.
  • Impuesto a las ganancias extraordinarias de la banca y otras empresas financieras (50 %).
  • Aumentos de regalías por la extracción de recursos naturales, lo que incrementó los ingresos fiscales y retuvo las divisas que salían en concepto de remesas de utilidades.