OMS PIDE MAYOR ATENCIÓN A LA SEGURIDAD ALIMENTARIA Y DEJAR DE SUBVENCIONAR PLANTACIONES DE TABACO
Ginebra, 26 de mayo de mayo (Economía y Mas).- La Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió hoy a los gobiernos dejar de subvencionar los cultivos de tabaco para sustituirlos por alimentos y así hacer frente a la inseguridad alimentaria.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) pidió hoy a los gobiernos dejar de subvencionar los cultivos de tabaco para sustituirlos por alimentos y así hacer frente a la inseguridad alimentaria.
En ocasión de celebrarse el próximo domingo el Día Mundial Sin Tabaco, la agencia sanitaria de las Naciones Unidas instó a apoyar cultivos más sostenibles que puedan alimentar a millones de personas.
En total, 182 Partes del Convenio Marco para el Control del Tabaco se han comprometido a promover alternativas económicamente viables para los trabajadores y cultivadores de este producto.
Una forma crucial en que los países pueden cumplir esta obligación es dejar de subvencionar a ese cultivo e incorporar unos más sanos, precisó.
La OMS recordó que, al elegir sembrar alimentos en su lugar, se prioriza la salud, preserva los ecosistemas y aumenta la seguridad alimentaria.
El tabaco es responsable de ocho millones de muertes al año y, sin embargo, los gobiernos de todo el mundo gastan millones en apoyar su cultivo, dijo el director general de la Organización, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Según cálculos más de 300 millones de personas en todo el mundo se enfrentan a una grave inseguridad alimentaria, mientras más de tres millones de hectáreas de tierra en unos 120 países se utilizan para cultivar el mortífero tabaco, incluso en naciones donde la gente se muere de hambre.
El nuevo informe de la OMS, Cultivar alimentos, no tabaco, pone de relieve los males de su cultivo y los beneficios de cambiar a plantaciones alimentarias más sostenibles, tanto para las comunidades, las economías, el medio ambiente y los agricultores.
Asimismo, señala que la siembra de tabaco provoca enfermedades a los propios agricultores y que más de un millón de niños trabajan en las explotaciones tabacaleras, por lo que pierden la oportunidad de recibir una educación.
«El tabaco no es sólo una amenaza masiva para la inseguridad alimentaria, sino para la salud en general, incluida la de los cultivadores, por su exposición a pesticidas químicos, humo y tanta nicotina como la que contienen 50 cigarrillos, lo que provoca afecciones pulmonares crónicas e intoxicación, aseguró la OMS.