CON 13 PLANTAS INDUSTRIALES, BOLIVIA DEJARÁ DE IMPORTAR ABONOS PARA EL SECTOR AGRÍCOLA
La Paz, 19 de julio de 2023 (Economía y Mas).- Con la implementación de 13 plantas industriales en el área de los agrofertilizantes y bioinsumos, Bolivia dejará de importar abonos para el sector agrícola, de acuerdo con información oficial.
Una de estas obras es la Planta de Producción de Fertilizantes Granulados NPK (cuya construcción finalizará en agosto), además de otras 12 plantas de bioinsumos, entre abonos y agrofertilizantes de diversa procedencia, según datos oficiales.
De acuerdo con información gubernamental, con la producción de las factorías la cadena de producción cerrará un círculo y se dejará de importar un insumo esencial como es el abono y “así no solo se garantizan mejores cosechas, sino que se tiene un producto bandera para la exportación”.
“Gracias a las vastas reservas de recursos hidrocarburíferos y evaporíticos y al avance de su industrialización se abre un nuevo filón productivo: los agrofertilizantes, y se impulsa el desarrollo de la producción agrícola para garantizar la soberanía y seguridad alimentarias”, citó una publicación del Gobierno referida a las plantas.
La mayoría de las nuevas plantas es de agroinsumos, están distribuidas en seis departamentos del país.
Como ejemplo de la importancia del sector está la Planta de Amoniaco y Urea, en Bulo Bulo, Cochabamba, que trabaja al 100% de su capacidad y cuya producción cubre el mercado interno y se exporta a Brasil, Argentina y Perú.
Bolivia obtuvo $us 228 millones que ingresaron al Tesoro General del Estado (TGE) por la venta de urea en 2022; y hasta junio de este año se facturaron más de $us 46 millones por la comercialización de 123.908 toneladas métricas (TM) de urea granulada.
Como estos mercados tienen alta demanda y además hay interés de otros países, se definió implementar una segunda planta de urea, informó Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB).
El nuevo complejo tendrá una capacidad de producción de 60.000 toneladas al año.
Según datos de la estatal petrolera, en Brasil la urea boliviana puede generar ventaja competitiva por el tema logístico, puesto que este país es cercano a Bolivia, en tanto la urea de otros continentes tiene costos logísticos elevados para llegar hasta ese destino.
La urea, además de demostrar el éxito de la industrialización, es un ejemplo claro de seguridad alimentaria. “La urea como fertilizante nos garantiza alimentos y no solo para Bolivia, sino para la región, por eso iniciamos esta gestión con la ingeniería para la construcción de la segunda planta y ser proveedores”, aseveró en enero el titular de YPFB, Armin Dorgathen.